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Luego de realizar películas íntimas e intensamente personales en los setentas (como "3 Women", "Thieves Like Us" y "The Long Goodbye"), el director norteamericano Robert Altman empezó a desarrollar un peculiar estilo, el cual consiste en crear situaciones aparentemente espontáneas que giran vagamente alrededor de una ambigua trama, y filmarlas casi como un fisgón, un espía que escucha conversaciones o presencia hechos de manera casi accidental, dejando al público el trabajo de construir la historia a partir de las imágenes resultantes.
Este inusual estilo puede irritar a algunas personas, pero yo lo encuentro fascinante. Ciertamente las películas recientes de Altman que siguen este patrón (como "Short Cuts", "Pret-a-porter", "Dr. T and the Women" y "Gosford Park") sufren por tener una narrativa fragmentada e inconexa, pero a cambio nos ofrecen un hipnótico tapiz de personajes, relaciones y dinámicas que invitan a la interpretación y al análisis. En resumen, Altman nos presenta situaciones y hechos casuales, y recae en la audiencia la abstracción de la historia o mensaje que se desea transmitir.
"El Acto" (¿era tan difícil traducir el título original de "La Compañía"?) sigue al pié de la letra el estilo de Altman, al mostrarnos las interioridades de la prestigiosa compañía de ballet Joffrey, de Chicago. La "historia" cubre un período de varios meses, en los que vemos el origen y desarrollo de una nueva pieza de ballet moderno, titulada "La Serpiente Azul", y los altibajos físicos y emocionales de los participantes, desde Alberto Antonelli (Malcolm McDowell), el rígido pero genial director de la compañía, hasta Loretta Ryan (Neve Campbell), una prometedora bailarina que complementa su pasión artística con un trabajo como mesera en un bar y con una semi-estable relación con su novio Josh (Harry Osbor--- perdón, James Franco).
Sin embargo, y a diferencia de la única película reciente sobre ballet que recuerdo ("Center Stage", del 2000), "El Acto" no es una telenovela juvenil sobre el drama de los bailarines. Como mencioné previamente, la película muestra escenas varias donde espiamos a los personajes en juntas de negocios, encuentros románticos, ensayos y recitales de ballet. Hay romance, intriga, creatividad, triunfo y fracaso, pero en ningún caso el guión se centra en esos factores... sólo son eventos periféricos que la cinta no se detiene a contemplar, pues prefiere continuar su interminable exploración de nuevas situaciones, nuevas relaciones y nuevas consecuencias.
En una estructura tan abierta y flexible como ésta, no hay mucha oportunidad de lucir a los actores, pero aún así los protagonistas tienen buen desempeño. Malcolm McDowell, como el director del ballet, llena su personaje de idiosincrasias y actitudes que dibujan perfectamente a una persona creativa que ha sido forzada a adoptar un papel administrativo. Neve Campbell (co-escritora de la historia, productora e iniciadora del proyecto) como una de las principales bailarinas de la compañía realiza un trabajo sutil y creíble, y es notable la transformación física a la que se ha sometido para representar, con un mínimo de dobles, las exigentes rutinas de ballet que aparecen en la cinta.
Lo cual me lleva al único factor que interesará a muchas personas: el ballet mismo. Yo no soy aficionado a ningún tipo de danza, pero incluso como ignorante total he apreciado el excelente trabajo de los bailarines, cuyo desempeño físico es absolutamente impresionante. Las rutinas son innovadoras y muy dinámicas, y la dirección de cámaras combina muy acertadamente los puntos de vista "desde la audiencia" con los atisbos de la coreografía de técnicos y directores tras el escenario, tal vez menos artística, pero igualmente precisa y disciplinada.
A pesar de todo esto, no estoy seguro de que "El Acto" deje satisfechos
a los segmentos del público que estén interesados en verla;
tal vez los aficionados al ballet encontrarán la narrativa lenta y
obtusa, mientras que los entusiastas del "docu-drama" la encontrarán
fría, distante y emocionalmente estéril. No obstante, los que
gusten del cine experimental agradecerán que Altman, a pesar de su
edad (79 años) siga produciendo material que reta a su audiencia y
que no ofrece fáciles respuestas. Y aunque no lo parezca, en estos
días eso es un gran halago.
Calificación: 7
Imagen © 2003 Sony Pictures Classics
Dirigida por Robert Altman
Escrita por Barbara Turner y Neve Campbell
Editada por Geraldine Peroni
Elenco:
Neve Campbell .... Loretta Ryan
Malcolm McDowell .... Alberto Antonelli
James Franco .... Josh
Barbara Robertson .... Harriet
William Dick .... Edouard
Susie Cusack .... Susie
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