Héroes Fuera de Orbita, por Pablo

Hace alrededor de diez años William Shatner (el Capitán Kirk) apareció en el notorio programa de comedia norteamericano "Saturday Night Live", y en un sketch que parodiaba una de las famosas convenciones de fans donde se rinde tributo a los actores de "Star Trek", lanzó un claro mensaje, que dentro de la broma, era totalmente serio: "Star Trek es un pequeño programa que hice hace veinte años, una chamba más... no lo tomen tan en serio... vivan en la realidad" (estoy parafraseando). Aunque el contexto era de parodia humorística, esto ofendió profundamente a las legiones de admiradores que sin pena alguna han transformado una antigua serie de ciencia ficción en un emporio financiero, una fuente (casi) inagotable de dinero para Paramount Pictures, y más importante, una cuasi-religión fervorosamente seguida por literalmente millones de personas.
La película "Héroes Fuera de Órbita" (¡Bravo, maestro traductor!), puede parecer burla de este sub-mundo de los aficionados compulsivos y de la extraña atracción a personajes de televisión; en realidad es un homenaje para los fanáticos y su sistema, y aunque hay mucho humor nunca es malicioso; la intención no es la burla despectiva de quienes han elegido dedicar su tiempo libre a analizar incansablemente los puntos más arcanos de esos programas de televisión; por el contrario, siempre hay respeto y reverencia por aquello que miles disfrutan y que se ha convertido en un lazo de unión, un elemento que permite experimentar la sensación de pertenencia que muchas veces hace falta en la vida cotidiana.
Lanzo este rollo como marco teórico para que se comprenda mejor el atractivo de "Héroes Fuera de Órbita". En esta película vemos a los actores de un antiguo programa de televisión llamado "Galaxy Quest" ("Expedición Galáctica"), que funciona para todo propósito como un doble del venerable "Star Trek" clásico. Al igual que pasa con éste, los actores secundarios resienten la inexplicable fama de su "capitán" y hay tensiones dentro del grupo, cuya relación es muy alejada de la que se mostraba en televisión. Sin embargo, para los fanáticos, ellos no son los actores, sino los personajes que alguna vez encarnaron. Sorpresivamente, algunos de esos fanáticos no son de este planeta, y creyendo que los actores son auténticos héroes militares, los reclutan para librar una batalla en un lejano punto del universo, donde deberán enfrentar, además del enemigo, sus propios conflictos e inseguridades.
El guión, sin ser muy original, y hasta un poco predecible, se encarga de dispensar situaciones humorísticas con inteligencia; sin ser humor intelectual (¿qué es eso?), evita rebajarse al uso del humor escatológico tan de moda; su mejor logro, sin embargo, es lograr el balance perfecto entre el humor dirigido a los fanáticos de "Star Trek" y la ciencia ficción y el dirigido al público en general. Con esto quiero decir que no es necesario ser conocedor de "Star Trek" para apreciar la película, pero quien lo sea disfrutará de un nivel adicional muy agradable.
Los personajes están tan bien dibujados, y se ajustan con tanta fidelidad a los clichés esperados, que las actuaciones pasan desapercibidas, aunque no por eso son malas. En general el elenco es competente, y la tercia principal (sin duda emulación de Kirk/Spock/McCoy) de Tim Allen, Alan Rickman y Sigourney Weaver sobresale por el detalle sutil que aplica a sus actuaciones. Con pequeños gestos y actitudes convierten en humanos a sus personajes, que debido a la ligereza del guión podrían fácilmente convertirse en caricaturas. El resto del elenco sufre un poco de esto, pero en el contexto de la película no demerita del propósito básico de entretenernos con una inteligente pero respetuosa parodia del fenómeno de "Star Trek".
Debo mencionar especialmente los maravillosos efectos especiales, cortesía de Industrial Light & Magic. De algún modo lograron conciliar el realismo con la obligada exageración estilística de este sub-sub-género (comedia de Ciencia Ficción), y su resultado es extraordinario. Sin ser tan vistosa o innovadora como su titánica labor en "La Amenaza Fantasma", resulta muy competente y sobre todo brilla a nivel de conceptualización. Claro que en el aspecto de dirección de arte tuvieron la ayuda de las leyendas vivientes Simon Bisley y Berni Wrightson.
Buena comedia, ligera y blanca, con especial atractivo para fanáticos y observadores del fenómeno de Star Trek. Como comedia de Ciencia Ficción, mejor que "Space Balls", pero sin llegar a las excelsas alturas de "Futurama".

Calificación: 9

Pablo

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Héroes Fuera de Orbita (Galaxy Quest)

Héroes Fuera de Orbita
(Galaxy Quest)