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Aunque el cine independiente usualmente muestra la obra de realizadores jóvenes, no hay que olvidar que hay un buen número de veteranos que desde hace varias décadas trabajan fuera del establecimiento de Hollywood, produciendo obras valientes e innovadoras que enriquecen periódicamente la cinematografía universal.

Una de las voces más personales en ese grupo corresponde a Neil Jordan, quien incansablemente produce material de calidad. En casos contados esta calidad se traduce en éxito económico (por ejemplo, la celebrada "The Crying Game" y la popular "Entrevista con el Vampiro"), pero con más frecuencia sus cintas pasan desapercibidas por las audiencias de los modernos multicinemas. Y, tristemente, esta vez ocurrirá lo mismo con la excelente cinta "Un Gran Ladrón".

Al comenzar la película conocemos a Bob (Nick Nolte), un ex-ladrón adicto a la heroína y al juego, viviendo en Francia como una figura anónima en el bajo mundo de la ciudad de Niza. También conocemos a Roger (Tchéky Karyo), un honesto y tenaz policía que arrestó a Bob en numerosas ocasiones, pero que luego de años de antagonismo se ha convertido en amigo del ladrón... o tal vez en un enemigo honorable. Entonces, cuando Bob acepta la oferta de organizar el robo de un gran casino en Monte Carlo, Roger se entera y decide evitar el crimen, no tanto porque sea su deber, sino porque quiere evitar que Bob caiga de nuevo en presidio. Mientras tanto, el "ex-ladrón" y su equipo desarrollan el arriesgado plan para llevar a cabo el magno robo, lo cual no será fácil, debido a la gran seguridad del casino... y a las traiciones internas en el grupo de "profesionales".

El argumento de "ladrón retirado que regresa para un golpe final" se ha explotado hasta el cansancio, pero puedo decir con confianza que "Un Gran Ladrón" es muy superior a todas las películas que han tocado el tema en los últimos años (incluyendo "Ocean's Eleven", "Heist", "The Score" y "The Italian Job", y quién sabe cuántas se me están olvidando). La razón de esto es que el guión (basado en una película francesa) está maravillosamente escrito. Y aunque se basa, como es costumbre, en una sorpresiva revelación final, no se enreda innecesariamente tratando de engañarnos. El engaño está siempre a la vista de la audiencia, pero es hasta el final cuando nos damos cuenta de ello. No quiero revelar demasiado sobre la cinta, pero baste decir que esta elegante simplicidad confiere una complejidad oculta que resulta en una conclusión lógica y muy satisfactoria.

La dirección de Jordan es también muy afortunada. Empleando un estilo ligeramente más dinámico de lo usual, el director y su cinematógrafo crean un mundo contrastante, pero consistente. Desde los elegantísimos casinos hasta los cuartuchos donde se planea el robo, todas las locaciones comparten una pátina de decadencia que evoca el estado mental del protagonista y la dualidad entre el mundo del hampa y la clase alta, igualmente corruptos, pero en extremos opuestos de la sociedad.

Y hablando de corrupción, el elenco que Jordan ha armado complementa maravillosamente el argumento. Desde luego la atención está centrada sobre Nick Nolte, que parece haber nacido para este papel. Su interpretación de Bob el ladrón es impecable y totalmente creíble. Supongo que no ha sido coincidencia que Jordan lo eligiera, considerando la similitud entre el personaje y la vida personal del actor, pero sea por la razón que sea, "Bob" y Nolte se fusionan para crear un personaje fascinante, honesto y humano. Tchéky Karyo, como Roger, tiene un papel menos lucidor, pero igualmente difícil. Con mínimo esfuerzo logra dibujar la compleja relación entre el policía y el ladrón, creando un eje emocional realista e intenso, en torno al cual gira la trama.

Pero, aunque sea menos notorio, igualmente loable es el esfuerzo del elenco secundario, que va desde Gérard Darmon como el confidente de Bob y el organizador del plan, hasta Emir Kusturica, como el extravagante ruso encargado de eludir el sistema de seguridad; y no podemos olvidar a Nutsa Kukhianidze como Anne, una prostituta rusa que Bob quiere proteger del bajo mundo francés. La novata actriz tiene una presencia muy extraña en pantalla, pero no parece ser una afectación, sino su persona real, enigmática y vagamente siniestra.

Tal vez "Un Gran Ladrón" no es tan socialmente relevante o tan profunda como otras cintas de Neil Jordan. De hecho, tal vez se trata de una de sus obras más ligeras. Pero el sólido elenco y el preciso guión la convierten en una de las más accesibles y más entretenidas películas de este director. Desde luego no hay grandes estrellas ni efectos especiales para atraer a las audiencias modernas, pero quienes quieran ver una excelente muestra de cine criminal moderno, harán bien en buscar esta humilde, pero muy competente cinta. No se arrepentirán.

Calificación: 9

Pablo

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Un Gran Ladrón
(The Good Thief)


Imagen © 2002 Alliance Atlantis Comm.

Alliance Atlantis Comm., 2002
108 minutos

Dirigida por Neil Jordan
Escrita por Neil Jordan, basado en la película "Bob le Flambeur", de Auguste Le Breton y Jean-Pierre Melville
Editada por Tony Lawson

Elenco:
Nick Nolte .... Bob
Nutsa Kukhianidze .... Anne
Tchéky Karyo .... Roger
Saïd Taghmaoui .... Paulo
Gérard Darmon .... Raoul
Ouassini Embarek .... Said
Marc Lavoine .... Remi
Emir Kusturica .... Vladimer

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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