Océano de Fuego, por Pablo

Hace un cuarto de siglo Joe Johnston empezó a ganar fama cuando trabajaba para la empresa de efectos especiales Industrial Light & Magic, donde, como director de arte, fue responsable por el diseño de dos de los personajes más populares del universo de Star Wars: Boba Fett y Yoda. Años después, bajo la tutela de Steven Spielberg, Johnston debutó como director, y como tal su carrera ha tenido cierto éxito, aunque artísticamente sus obras varían entre el virtuosismo de "October Sky" y "Rocketeer", hasta el vulgar comercialismo de "Jumanji" y "Jurassic Park III".

Su más reciente cinta, "Océano de Fuego" está entre ambos extremos; sin ser particularmente buena, al menos resulta moderadamente entretenida... durante las partes que no aburren.

La cinta sigue las aventuras de Frank Hopkins (Viggo Mortensen), un vaquero norteamericano cuyas hazañas ecuestres son tan famosas que recibe una invitación del Sheik Riyadh (Omar Sharif) para participar en una mortal carrera de 3,000 millas (4,800 kilómetros) a través del desierto del Medio Oriente. El vaquero acepta la invitación y, acompañado de su fiel caballo Hidalgo, Hopkins se traslada al otro lado del mundo, sin saber que durante la carrera deberá enfrentar no sólo los peligros del desierto, sino los sospechosos avances de la elegante dama Anna (Louise Lombard) y las traiciones de los demás competidores.

El principal problema de esta cinta es que dedica largo tiempo a establecer los personajes. Si fueran novedosos o complejos, esto sería una ventaja, pero tales personajes no pasan de ser los clásicos estereotipos de este tipo de cine, por lo que parece tiempo perdido el dedicado a explicar sus motivaciones y sus personalidades. Así tenemos al estoico héroe, cuya ascendencia india le hace respetar la naturaleza; al enigmático Sheik árabe y a su atractiva y progresista hija; a la elegante dama inglesa de dudosas intenciones; al sabio indio Sioux cuyas solemnes homilías y doctrinas bordean el ridículo... y no olvidemos al precoz niño que "ameniza" algunas escenas.

Creo que mi personaje favorito resultó ser el caballo.

Luego de cuarenta y cinco minutos de tedio, la película empieza a cobrar vida al iniciar la famosa carrera... pero rápidamente pierde ese impulso cuando se interpone el audaz rescate de una princesa árabe. Ciertamente esa es una de las secuencias más emocionantes de la cinta, pero es indudable que destruye el ritmo de la carrera, y parece ser parte de otra película. No obstante, me dio gusto ver en la pantalla a la guapa Zuleika Robinson, quien hizo muy buena labor en el prematuramente cancelado programa televisivo "The Lone Gunmen".

Y, hablando del elenco, Viggo Mortensen entrega una versión diluida de Aragorn (de la trilogía de "El Señor de los Anillos"), pero con un sabor a viejo oeste, como es de esperar. Y si bien Mortensen tiene agradable presencia y razonable talento, el personaje que interpreta es tan genérico que no invita al lucimiento del actor. Omar Sharif destaca más por su sorpresiva presencia (¿cuántas veces se ha "retirado"?) que por su interpretación del consabido dignatario árabe... en fin, creo que disfruté más del elenco secundario (J.K. Simmons como el célebre Buffalo Bill, Louise Lombard como la siniestra Anne Davenport, y Elizabeth Berridge como la famosa tiradora Annie Oakley) que de los estelares.

Sin embargo, como dije anteriormente, hay buenas secuencias durante la película, aunque hay que esperar largo rato para llegar a ellas. Esas secuencias, junto con la impresionante cinematografía, el diestro uso de efectos especiales, y el notable desempeño de los caballos, ayudan a pasar el rato de manera agradable, aunque no sé si eso baste para recomendar "Océano de Fuego". Además, como nota curiosa, hay un elemento ajeno al terreno fílmico que me dejó un mal sabor... aparentemente el estudio Touchstone (división de Disney) pretende vender esta cinta como "Basada en una Historia Real", aunque bastantes historiadores (particularmente la cofradía de aficionados ecuestres "The Long Riders") concuerdan en que las supuestas hazañas de Frank Hopkins son totalmente apócrifas, hecho supuestamente comprobable con una somera revisión de documentos de aquella época. Ciertamente, como he escrito varias veces en este sitio, no espero una lección de historia cuando voy al cine, pero el que las mentiras provengan del material mismo en el que se basó la cinta, y no de los "creativos" guionistas, me parece un poco excesivo, y poco ética la actitud de Touchstone. ¿Poca ética en Hollywood? ¡Escándalo!

En fin, eso no debería influir en la opinión que alguien tenga de "Océano de Fuego"... la película tiene ya bastantes problemas por sí sola, y aunque me divirtió ocasionalmente, no está al nivel de otras aventuras similares, pues carece del exuberante dinamismo de "La Momia" y del perfecto ritmo y tono de las cintas de Indiana Jones (obviamente las inspiraciones temáticas y estilísticas de "Océano de Fuego"). Para el mercado infantil es demasiado larga, y para los adultos es muy poco original. De cualquier modo, a pesar de ser una especie de "Spielberg Lite", creo que Joe Johnston tiene el potencial de mejorar su carrera, y espero que tenga más suerte en su siguiente película. Tal vez algo acerca de un caballo prehistórico que vuela con un jetpack...

Calificación: 6

Pablo

Manda tus comentarios por correo o visita nuestro Foro de Mensajes

Océano de Fuego (Hidalgo)

Océano de Fuego
(Hidalgo)