Devorador de Pecados, por Pablo

Una falla común de los guionistas convertidos en directores de cine es que tienden a ser demasiado complacientes consigo mismos, lo que frecuentemente da como resultado películas obtusas, torpes y en extremo pretenciosas (¿alguien dijo "Costner"?) Pero cuando se demuestra que la persona tiene visión y talento, el resultado puede ser muy satisfactorio. Tal fue el caso de Brian Helgeland, escritor de buenas películas, como "L.A. Confidential", “Conspiracy Theory” y “Highway to Hell”. Su debut como director fue con la película “Payback”, ligera pero divertida, y luego siguió con "A Knight's Tale", que si bien no fue una obra maestra, al menos mostró ingenio, destreza con la cámara y un perfecto sentido del humor que la hizo muy entretenida.

Desde luego eso produjo grandes expectativas sobre su siguiente cinta, que ahora nos llega con el nombre de "El Devorador de Pecados". Desafortunadamente este segundo esfuerzo no resultó tan bueno como el primero.

La trama gira alrededor de la enigmática figura del título, el "devorador de pecados", quien supuestamente absuelve de culpa a aquellas personas que por diversas causas no pueden ser atendidas por un sacerdote antes de morir. El problema es que el aparente suicidio de un anciano sacerdote parece ser un asesinato ritual, efectuado por uno de esos devoradores. Entonces el Padre Alex Bernier (Heath Ledger), su amigo Thomas (Mark Addy) y su extraña amiga Mara (Shannyn Sossamon) deciden indagar sobre la existencia del mítico individuo, para hacerlo pagar por la muerte del anciano, que alguna vez fue mentor de los sacerdotes. Afortunadamente ambos tienen experiencia en asuntos paranormales, lo que les será de gran ayuda, pues en su investigación encontrarán resistencia de parte de las fuerzas oscuras... que en ocasiones toman forma humana.

Creo que esta cinta llega demasiado tarde. Hace una década, todavía era posible abordar las conspiraciones de la Iglesia Católica con cierto grado de sorpresa y amarillismo, pero dado que las realidades de la vida eclesiástica han excedido incluso la imaginación de sus detractores, ya no quedan muchos temas que parezcan misteriosos o envueltos en escándalo. Pero incluso sin tomar eso en cuenta, "La Orden" es un tanto lenta y torpe, con un guión que no se decide entre ser de terror o simplemente un tratado teológico sobre la fe, la culpa y la eterna lucha entre ciencia y religión.

Finalmente ni logra ser uno o el otro, y aunque ciertamente hay escenas ingeniosas y atractivas (como los "flashbacks" a la creación de la Capilla Sixtina), el resultado final es poco satisfactorio. Parte de la culpa recae en los actores; habiendo reunido casi al elenco completo de "A Knight's Tale" (sólo falta Paul Bettany), Helgeland los abandona con diálogos pretenciosos y solemnes, que más que impulsar la historia, la arrastran pesadamente, hasta la predecible conclusión, que por cierto promete secuelas. Ledger y Sossamon han mostrado cierto talento en otras películas... tal vez no son maestros del arte histriónico, pero al menos poseen cierta energía que los hace carismáticos e interesantes. No así en "La Orden". La cinematografía gris y opaca parece haber contagiado a los actores, quienes no muestran vida o humanidad. Y no hablemos de los efectos especiales, totalmente innecesarios y de deficiente manufactura.

"La Orden" resultó ser una desilusión doble; primero por la expectativa creada por la cinta previa del director; y en segundo lugar, por tratar un tema muy favorecido por el género de terror, pero sin conseguir la subversiva emoción de contemplar las conspiraciones religiosas de la Iglesia Católica. Tal vez el propósito de la cinta era enfocarse más en la psicología de los personajes, pero en ese aspecto tampoco funciona, ya que son aburridos y planos. Finalmente creo que esta película sólo será de interés para los más ávidos completistas del género y para las más fervientes admiradoras de Ledger. Los demás, mejor lean un libro sobre el tema, o sumérjanse en un sitio en la red sobre conspiraciones religiosas. Incluso rentar "Stigmata" sería una mejora, y eso ya es decir mucho. Sin embargo, sigo optimista sobre la carrera de Brian Helgeland como director. Ojalá que próximamente se justifique ese optimismo.

Calificación: 5

Pablo

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Devorador de Pecados (The Order)

Devorador de Pecados
(The Order)