Dirigida y escrita por Isabel Coixet
Editada por Irene Blecua
Elenco:
Sarah Polley .... Hanna
Tim Robbins .... Josef
Javier Cámara .... Simon
Sverre Anker Ousdal .... Dimitri
Steven Mackintosh .... Dr. Sulitzer
Eddie Marsan .... Victor
Julie Christie .... Inge
El crear una historia interesante y emotiva con tan sólo dos personas hablando parece ser el eterno experimento de guionistas en todo el mundo y en todos los tiempos. No todos lo consiguen, pero el resultado casi siempre es de algún modo ingenioso y creativo.
"La Vida Secreta de las Palabras" es una instancia más de este experimento, y en general la directora Isabel Coixet produce resultados favorables, que ayudan mucho a compensar el lento ritmo de la trama y la artificialidad de su ejecución.
La cinta se centra en Hannah (Sarah Polley), una joven mujer aislada del mundo tanto por su deficiencia auditiva como por su doloroso pasado. Obligada a tomar unas vacaciones de su rutinaria labor en una fábrica, la joven casualmente se entera de que un obrero accidentado requiere cuidados especiales en una remota plataforma petrolera y, como Hannah fue alguna vez enfermera, decide solicitar el trabajo.
Una vez en la casi abandonada plataforma, Sarah atiende a Josef (Tim Robbins), un voluble hombre temporalmente ciego por las heridas que sufrió, y así comienza a desarrollarse una curiosa relación que podría inspirar a ambos a superar las barreras emocionales detrás de las que se esconden sus auténticas personalidades.
La cinta "Mi Vida sin Mí", previa obra de Coixet, me pareció un competente ejercicio dramático que pecaba de humor artificial y forzado. En "La Vida Secreta de las Palabras" la directora muestra un estilo mucho más maduro y centrado que aprovecha cada elemento de la cinta para transmitir mensajes que refuerzan el tema central de aislamiento.
Sin embargo, el lento ritmo de la cinta y la forzada situación de los personajes centrales la hacen ocasionalmente frustrante. De ninguna manera es mala, pero costará trabajo llegar a su satisfactorio final.
A pesar de ello, hay mucho que recomendar en "La Vida Secreta de las Palabras", empezando por las actuaciones del elenco entero. Tim Robbins y Sarah Polley realizan un impresionante trabajo en los papeles principales, pero no hay que olvidar a Jaime Cámara, Eddie Marsan y Julie Christie en cortos, pero memorables papeles. Christie en particular tiene una de las mejores escenas de la película, y me hizo desear que fuera una presencia más constante en el cine actual. Quizás esta película revelará a nuevos directores el tremendo talento de esta veterana actriz.
La cinematografía es también interesante. A pesar de que emplea el mismo director de fotografía que en "Mi Vida sin Mí", "La Vida Secreta de las Palabras" ofrece imágenes mucho más ricas, no sólo visualmente, sino en su expresión de las enmudecidas emociones de los protagonistas. Jean-Claude Larrieu realiza un excelente trabajo combinando claustrofóbicas escenas íntimas con vastas tomas de la plataforma petrolera que sirven al mismo tiempo como contraste y analogía de los temas que el libreto maneja.
No puedo negar que me aburrió en ciertos pasajes, pero la fuerza emocional de "La Vida Secreta de las Palabras" respalda el parsimonioso ritmo y la ocasional artificialidad de su manufactura. Además, las excelentes actuaciones y la sólida dirección de Coixet hacen de esta cinta una dura pero totalmente satisfactoria experiencia que supera sus leves tropiezos con abundante inteligencia e intensidad. Por eso la puedo recomendar con entusiasmo no exento de precaución... quizás no sea para todos los gustos, pero sus temas y mensajes son ciertamente universales y muy válidos. Lástima que tome tanto tiempo llegar a ellos.
Calificación: 8.5