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Dead and Buried
(Dead and Buried)
AVCO Embassy Pictures, 1981
92 minutos

Dirigida por Gary Sherman
Escrita por Jeff Millar, Dan O'Bannon, Ronald Shusett y Alex Stern
Editada por Alan Balsam

Elenco:
James Farentino .... Dan Gillis
Melody Anderson .... Janet Gillis
Jack Albertson .... William G. Dobbs
Dennis Redfield .... Ron
Nancy Locke .... Linda
Lisa Blount .... Lisa
Robert Englund .... Harry
Bill Quinn .... Ernie
Michael Currie .... Herman

Imágenes © 1981 AVCO Embassy

Durante la década de los ochentas, el cine norteamericano vio el auge del género de terror, particularmente en el sub-género "slasher", como se llamó a las incontables películas que pretendían emular el éxito de "Friday the 13th" y "Halloween". Sé que esa fórmula se inició años atrás (algunos dicen que con "Twitch of the Death Nerve", de 1971; otros mencionan "Black Christmas", de 1974; muchos se van hasta 1960 con "Psycho"), pero no se puede negar que en los ochentas alcanzó la apoteosis. Por eso la fascinante película "Dead and Buried" permaneció tanto tiempo como joya olvidada; tuvo la mala suerte de estrenarse en un período cuando los jóvenes estaban hambrientos de la conocida fórmula de "asesino enmascarado". Y si bien "Dead and Buried" ofrece buenas dosis de sangre y violencia, su estructura es mucho más sutil y su mensaje más profundo. Por eso, mientras "Friday the 13th" comenzaba su interminable serie de secuelas (10 hasta el momento, si consideramos también "Jason Vs. Freddy"), "Dead and Buried" quedó perdida en el anonimato.

La cinta comienza con varias vistas del apacible pueblo costero de Potter's Bluff. Un turista toma fotos en la tranquila playa, hasta que una guapa mujer se le acerca... y lo asesina salvajemente, con ayuda de varios habitantes del pueblo, mientras otros toman fotografías del hecho. Posteriormente, un borracho vagabundo sufre un destino similar, al igual que una familia que se detiene a cargar gasolina en el pueblo... asesinatos ferozmente violentos, sin causa aparente, con los apacibles pueblerinos fotografiando impávidamente los crímenes. Pero el alguacil del pueblo no sabe esto, y se encuentra intrigado por los asesinatos, que no sabe a quién achacar, ni el motivo por el que se cometieron. Pero ese misterio se vuelve perturbador cuando algunas de las personas asesinadas comienzan a aparecer de nuevo en el pueblo, vivas y en perfecto estado. Entonces, el alguacil decide reclutar la ayuda del excéntrico dueño de la funeraria del pueblo, con la esperanza de que, entre los dos, logren resolver el misterio detrás de los asesinatos en Potter's Bluff... desafortunadamente la respuesta está mucho más cerca de lo que el alguacil sospecha.

No quiero revelar mucho sobre esta película, pues el deleite principal que ofrece es ir siguiendo la investigación del protagonista, y descubrir al mismo tiempo el siniestro secreto, hasta llegar al perturbador final. Pero lo que sí puedo decir es que la labor de los guionistas Dan O'Bannon y Ronald Shusett es casi perfecta. El pausado ritmo de la película enfatiza el temor y suspenso, y sus personajes se mantienen siempre realistas, aún en las extrañas circunstancias que los rodean. Y su comentario sobre la modernización del estilo de vida pastoral es un poco obvia, pero indudablemente válida.

Los aficionados al género de terror quizás reconocerán los nombres de Shusett y O'Bannon. Este equipo de guionistas fue responsable por las famosas cintas "Alien" y "The Return of the Living Dead", cuyo ingenio, suspenso y humor trascendió el humilde género. Menos exitosas, pero igualmente imaginativas fueron "Blue Thunder", "Lifeforce", "Invaders From Mars" (el re-make de 1986), "Total Recall" y "Screamers". No todas son buenas, pero me atrevería a decir que, si fracasaron, fue por causa del director... y por alejarse demasiado del guión.

Otra virtud de "Dead and Buried" que interesará al aficionado del cine fantástico, es el trabajo del gran Stan Winston como artista de efectos especiales. Winston ganó fama mundial con sus criaturas en "Aliens", "Jurassic Park" y "Terminator 2", pero hay que recordar que, como muchos artistas del ramo, comenzó haciendo efectos sanguinolentos para baratas cintas de terror. Sin embargo, su trabajo en "Dead and Buried" permite ver el incipiente talento de Winston, con algunas secuencias realmente sorprendentes, aún en nuestros días. Sólo basta con mencionar la memorable escena de la jeringa en el ojo...

Pero a pesar de su consistente guión y notables efectos, "Dead and Buried" tiene algunas fallas aparentes, como la plana dirección de Gary Sherman. Sólo con dos películas previas en su haber (y la más reciente de 1972), la carencia de estilo visual de Sherman es evidente. La película está filmada de forma demasiado simple y austera, sin saber aprovechar las siniestras locaciones, ni el tono de amenaza que evoca el libreto. Supongo que se podría alegar que Sherman buscaba naturalismo con su estilo de dirección, pero sólo puedo imaginar cómo hubiera mejorado la película con un director que conociera a fondo el género. Quizás Dan O'Bannon debió ofrecer el guión a su amigo John Carpenter...

De cualquier forma, el guión es la fuerza que dirige "Dead and Buried", y el elenco hace un trabajo decente en sus interpretaciones, destacando James Farentino como el alguacil Gillis, Jack Albertson como el excéntrico médico forense y la joven Lisa Blount como la guapa y mortal enfermera Lisa. También será de interés ver una corta participación de Robert Englund, años antes de convertirse un ícono del terror con Freddy Kruger.

Aunque se filmó en los ochentas, "Dead and Buried" aún conserva el estilo fílmico característico de las películas de horror de los setentas... visuales austeros, ritmo pausado y comentario social rampante. Por ello, quizás esta película sea más apreciada por los fanáticos al terror que por audiencias casuales. No obstante, "Dead and Buried" es una experiencia fascinante en varios niveles, y merece ser más conocida, para ocupar su justo lugar en los anales del género. Sería una pena que quedara sepultada, cuando tiene tanto que ofrecer...

Pablo del Moral

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